
Una familia ratona almacena alimentos para el invierno. Frederick, un ratón contemplativo y aparentemente vago, parece que no colabora. Pero cuando llega el invierno, largo y aburrido, y se acaban las provisiones, Frederick da a los demás lo que ha atesorado para esos momentos: rayos de sol, colores y palabras. El pequeño Frederick es un poeta.
Ceferino es un conejo muy despistado: una mañana sale de su casa para ir a la huerta y recoger coles para hacerse un caldo. Pero ha olvidado cerrar la


y sus amigos sus conciertos.
Cuando decide irse del pueblo a la ciudad
para participar en el concurso de música,
todos están tristes.Es un premio a la constancia y el esfuerzo.

No hay comentarios:
Publicar un comentario